El hígado

El hígado es la cocina donde se procesan  los alimentos que se absorben en los intestinos. Pero además, es el encargado de destruir los tóxicos, ayudar a matar gérmenes, proveernos la energía para caminar y pensar, y algunas otras cosas mas.

La palabra hepatitis comenzó a usarse hace años cuando se conocieron los virus que lo atacan en forma aguda o crónica. Es un error creer que la hepatitis solo la originan los virus, también los tóxicos industriales, los venenos agrícolas (agroquímicos), los medicamentos mal usados, el alcohol y las drogas de abuso. Entonces la palabra hepatitis engloba a muchas afecciones que tienen acción directa o indirecta sobre el órgano. Se empieza estudiar por el medico clínico basándose en las preguntas que él nos hace: que siente y cuando, que le duele, etc. Luego vendrán las ecografías, tomografías y análisis. Muchas veces, hoy en la vida moderna, sin actividad física y con comidas rápidas se suele acumular grasas (hígado graso). El hígado graso no es solamente un acompañante de la obesidad abdominal, es una enfermedad que se debe corregir, porque convivir con él durante mucho tiempo puede ser peligroso.

El hígado es un órgano que continuamente se está regenerando. Sus células, distribuidas en forma arquitectónica para funcionar como el instrumento de música mas perfecto, se mueren a cada momento y son reemplazadas por otras. La muerte de los hepatocitos (células del hígado) se refleja en los análisis de GOT, GPT, bilirrubina, fosfatasa alcalina y otros, y la evaluación de sus resultados nunca nos debe tentar a hacer búsqueda en internet, es muy difícil categorizar la enfermedad para  alguien que no sabe medicina. Una multitud de enfermedades pueden alterar los resultados del laboratorio desde las mas simples  a las mas complejas. La evaluación de las transaminasas, por ejemplo, no indica una enfermedad solamente.  Todos los médicos saben encuadrar los síntomas clínicos con los resultados, en especial los gastroenterólogos y hepatólogos.

El usar los análisis de rutina, que llamamos control del laboratorio, debe incluir análisis del hígado, se diría que es indispensable para evaluar un primer paso. Pero no alcanza con esto y es el médico quien debe mirarlo atentamente y decidir que pasos  se deben seguir para llegar a un diagnóstico de enfermedad.

Y por último, nadie crea que las bebidas alcohólicas son para pasar un buen momento de la vida, son un verdadero tóxico que hace mucho daño a su hígado, a su sistema nervioso, a todo el organismo. No lo use demasiado……el alcoholismo no es un vicio, es una enfermedad.